A DIUGANDEA



Me re//abro: dejo entrever mis sesos
Las venas rellenas de miedo, 
el largo latido hacia lo vivo.

Tu cuerpo tiene otro color 
ya no sabes a pasado
Estás radiante, fuerte, inmensa, 
ocupas mi espacio visual

Me entran ganas de recorrerte 
de saborear tu (silencio)

El espacio que nos separa 
se torna flexible, y descubro

Estoy entre la historia y el vacío, 
los puntos suspensivos 
marcan tus definiciones 
Mi mirada no es f i j a, 
aún así está sujeta al dolor

tomas otros Lugares en mi 
cuerpo, tus ojos ya no 
determinan mi piel

Estoy atenta: tu cuerpo se presenta 
desconocido, el aliento con el que 
humedeces mis palabras me 
alertan de la infinitud de posibilidades
que tiene nuestra mirada 
cardíaca. Rozo tu carne. Me 
permito sentir la amalgama de
transconclusiones que nos permiten

estar hoy 
abrazán.don.os.

Patricia Bertolín.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
;